Camino a Santiago: Etapa 21 (15-03-2007): León-Hospital de Orbigo (28,1 km)

Autor: F. Cárcamo.

Las previsiones iniciales indicaban que la etapa de hoy iba a tener 22km y nos llevaba desde León hasta Villadángos del Páramo. Pero el especialista la modifica radicalmente y recorreremos la variante por Villar de Matarife y terminaremos en Hospital de Orbigo (una propina de 12 kms); de esa forma, el día de regreso a Zazagoza nos quedaría una etapa corta.

Lo primero que hacemos antes de salir a caminar es gozar del desayuno que nos proporcionan en el albergue. Después leemos la guía donde dice “Salida de León: el peregrino se puede desorientar debido a la deficiente señalización; en este caso lo mejor es preguntar a la amable gente de León”. Además, como la salida de las grandes ciudades suele ser muy poco gratificante, haremos uso de las furgonetas que nos sacarán hasta La Virgen del Camino y nos ahorrará 7 kms.

El núcleo de La Virgen del Camino, surgió en torno al santuario dedicado a la patrona de León. Actualmente el edificio es de estilo modernista (1961) y el monumental e hierático apostolado que recorre la fachada se ha convertido en emblema del santuario. Las trece estatuas (los 12 apóstoles y la Virgen), en bronce, de seis metros de altura y 700 kilos de peso son obra del escultor José María Subirachs. Cuenta la leyenda que en este punto se apareció a principios del siglo XVI la Virgen María al pastor Alvar Simón quien, escéptico y reticente a creer en el milagro, solicitó a la Señora aparecida pruebas de su identidad. La Virgen arrojó una piedrecita y le dijo que cuando volviese con las autoridades eclesiásticas al lugar esta piedra se habría convertido en una gran roca, cosa que se cumplió. Desde ese momento el sagrado lugar ha sido punto de destino de romerías para los vecinos.

Al salir de León, acometemos unos cuantos toboganes y un cambio de paisaje hasta Fresno del Camino. Pero va a ser un espejismo y pronto retornamos al páramo leones y sus rectas interminables donde despuntan grupos compactos y desperdigados de robles.

El almuerzo lo haremos en Villar de Matarife, pueblo con 3 albergues, uno de ellos con una especie de gran nave vikinga en el jardín. Población de origen mozárabe fundada a finales del siglo IX o principios del X por la familia Mazaref. Asentamiento astur, llamado Vallata, por el que pasaba, en la época romana, la calzada de Astorga a Zaragoza y Tarragona. Para almorzar, además de lo habitual, José Luis ha comprado unas pastas y pronuncia la frase del día ante la elección de galleta de uno de los peregrinos: “como tonto, la más grande…”.

Como es habitual, a la salida se forman dos grupos: el de los rápidos y el de los lentos; en el segundo, vamos charlando sobre temas diversos: desde política hasta las prejubilaciones, pasando por sabrosas anécdotas animales de Donato. Una de ellas cuenta como en los extremos de un largo hilo ponía dos anzuelos con un gusano al que acudían dos gallinas: cuando ambas habían “picado el anzuelo” comenzaban a tirar con el consiguiente desastre en sus estómagos. Menos sangrantes, pero más rotundas, son sus anécdotas sobre su animal odiado: los gatos. Y aprovechamos para recordar lo que les hacia Antonio fuentes a los gatos: con todo su cariño, les preparaba una tortilla con virutas de corcho que al llegar al estómago les producía algún problemilla. Debo reconocer que esto no son charlas de peregrino pero… las rectas infinitas nublan el entendimiento. Y así vamos avanzando entre campos de maíz.

De Villar de Matarife nos separan 12 kms hasta Hospital de Orbigo. Cuando cruzamos la carretera que iría a Villavante, nos están esperando Gallego y Pérez porque alguien del pueblo les ha dicho que el mejor camino no va por donde indican las señales. Se produce una discusión entre Pérez (defiende al del pueblo) y Rafael que defiende las señales y su experiencia; intentamos mediar con alguna broma pero no es bien recibida por ninguno de los dos. Así es que los lentos nos rezagamos voluntariamente para seguir con nuestras cosas.

Desde Villavante, caminamos por algunos tramos con arbolado que agradecemos a estas horas del día; y si no fuésemos tan atropellados, incluso nos hubiésemos podido refrescar en un río que baja con bastante agua. Pero el sino del peregrino (y más si son de Os Andarines) es caminar y caminar sin tregua.

Atravesamos por encima de la autovía y adelantamos a dos chavalas extranjeras que van abrigadas hasta la cabeza mientras nosotros vamos en manga y pantalón corto. No es de extrañar que paren a recuperar fuerzas tras la cuesta del puente de la autovía.

Y allá delante ya tenemos Puente de Órbigo (en la margen izquierda) y Hospital de Órbigo (en la margen derecha). El puente de 19 arcos sobre el río Órbigo, de origen romano aunque remodelado en el siglo XVIII, es famoso por un suceso histórico que le dio fama. En el Año Jubilar de 1434 el caballero leonés don Suero de Quiñones organizó un torneo de armas, retando a todo caballero que quisiera transitar por el puente, a romper tres lanzas contra él y sus nueve acompañantes. Todo para conquistar a su dama Leonor Tovar. Se corrieron 727 carreras y se rompieron 166 lanzas durante un mes, con la excepción del día de Santiago. Cumplido el torneo -sólo murió un caballero- peregrinaron a Santiago donde entregó al apóstol un brazalete con la inscripción «Si a vous ne playst avoyr mesura/ certes ie di que ie suy sans ventura», que todavía se conserva en la Catedral y. que pertenecía a su dama. Don Suero, 24 años después, moriría en otro torneo contra uno de los caballeros que había vencido en el Paso Honroso de Órbigo

El río Órbigo también fue escenario de un hecho históricamente mucho más relevante; la batalla en el año 446 entre suevos y visigodos capitaneados por Teodorico que llevó a éstos a controlar la totalidad de la península ibérica.

El pueblo, al otro lado del puente, se levantó junto al hospital de los Caballeros de San Juan convertido hoy en un gran centro de servicios. Uno de esos servicios es el circo que se encuentra instalado en unos prados a la orilla del río y que va a actuar durante el fin de semana. Y otro de los servicios es el restaurante donde comemos (aunque algunos querían llegar a comer, no se a que hora, a Astorga). Finalmente, y como ninguno de los 3 albergues está abierto, tenemos que trasladarnos a dormir a Astorga.

Astorga es un pueblo de unos 15.000 habitantes, con parte del centro peatonal y… en consecuencia tenemos que dar alguna vuelta hasta conseguir llegar con las furgonetas hasta el albergue (luego comprobaremos que entrar y salir con coche era mucho más sencillo). El albergue es de lujo: habitaciones de 4 con literas dobles con somier de lamas, limpieza, buena cocina, una terraza asociada al comedor que podrá disfrutarse en las noches de verano, etc. El único pero es la temperatura de las duchas: tan caliente (y no regulable) que podría escaldar a un tocino; seguramente será Pérez el más molesto porque es el único que le gusta el agua fría para ducharse….

Como la etapa no la hemos terminado oficialmente en Astorga, dejo los comentarios sobre Astorga para la siguiente etapa. Pero no me resisto a incluir los datos de Villadangos del Páramo, localidad donde hubiésemos podido finalizar la etapa. Villadangos está situada en un valle típico del páramo leonés próximo a la margen izquierda del río Órbigo. Fue una localidad de las que primero se repoblaron durante la fase inicial de la Reconquista. Tuvo lugar en el año 1111 una sangrienta batalla entre las huestes de la reina doña Urraca y su ex marido el rey Aragonés Alfonso I «el Batallador» acompañado de su hijo Alfonso VII. La iglesia parroquial está dedicada a Santiago que preside el retablo del altar mayor, espada en mano y tocado a la usanza militar. En las puertas del templo, hay tallados dos graciosos populares relieves policromados que representan la mítica victoria del rey leonés Ramiro I sobre Abderramán II en la batalla de Clavijo (La Rioja), gracias a la ayuda de Santiago Apóstol.

Por la tarde, visita a Astorga y compra de productos típicos: mantecadas, hojaldres y chocolate. Además hay que hacer la compra para la ultima cena de esta semana: ensalada, tomate (discusión sobre si se aliña con vinagre o no), sardinas, embutidos y queso, y….¡¡dos tartas y 2 barras de helado!!: es el cumpleaños de José Luis, el administrador del dinero.

Un lugar donde nos detenemos en nuestro paseo es en la plaza del ayuntamiento, con su bella fachada del siglo XVII, donde se custodia el pendón de la batalla de Clavijo. En su reloj de autómatas dos figuras, Colasa y Juan Zancuda, «dan las horas pero no los cuartos» según un dicho popular que hace irónica alusión a la supuesta tacañería de los habitantes de la ciudad

La noche es tranquila pero el despertar es nervioso porque hay prisas por comenzar a caminar y por terminar este periplo del Camino.

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